El Parque Nacional Picos de Europa se encuentra en las provincias de Cantabria, Asturias y León, siendo el único Parque Nacional perteneciente a tres comunidades autónomas diferentes y gestionado de forma conjunta.
SITUACIÓN
El Parque Nacional de los Picos de Europa constituye uno de los principales tesoros naturales españoles, situándose en la parte central de la Cordillera Cantábrica, a caballo entre tres comunidades autónomas: Asturias, Cantabria y Castilla y León, aportando esta ultima la mayor superficie del Parque Nacional con sus dos municipios, Valle de Sajambre y Valle de Valdeón. El parque engloba tres macizos calizos bien diferenciados, el occidental o del Cornión, el central o de los Urrielles, y el oriental o de Andara, delimitados en parte por espectaculares desfiladeros (Los Beyos, la Garganta del Cares y la Hermida), mostrando un relieve extraordinariamente escarpado con diferencias de cota entre las cumbres y los valles que llegan hasta los 2500m.
PROTECCIÓN
Los Picos de Europa constituyen uno de los enclaves montañosos más sobresalientes de la Cordillera Cantábrica, con un alto interés botánico, zoológico, geológico, geomorfológico y paisajístico.
El macizo occidental fue declarado Parque Nacional el 22 de julio de 1918 por Alfonso XII bajo el nombre de Parque Nacional de la Montaña de Covadonga, siendo el primer espacio protegido del país. Inicialmente comprendía 16.925 ha, hasta que el 30 de mayo de 1995 se amplió su extensión hasta las 64.660 hectáreas actuales. Ese año entró a formar parte de la Red de Parques Nacionales y siendo uno de los primeros espacios naturales protegidos.
El 9 de julio de 2003 la Unesco aprobó la propuesta que lo convierte en Reserva de la Biosfera.
La declaración de este Parque Nacional tiene por objeto:
a) Proteger la integridad de los ecosistemas incluidos dentro de sus límites, que constituyen una representación significativa de los sistemas naturales y seminaturales asociados al bosque atlántico en la provincia orocantábrica, así como de los elementos físicos y biológicos que los caracterizan.
b) Contribuir a la protección, recuperación, fomento y difusión de los valores culturales y antropológicos que conforman la historia de este espacio natural.
c) Facilitar el conocimiento y disfrute de sus principales valores asegurando, siempre en forma compatible con su conservación, tanto la actividad investigadora y educativa como el simple acceso de los visitantes.
d) Aportar al patrimonio nacional, europeo y mundial una muestra representativa de los ecosistemas de montaña en los Picos de Europa, y su legado natural y cultural, participando en los programas nacionales e internacionales de conservación de la biodiversidad.
ECOSISTEMA
En los Picos de Europa predominan los ecosistemas de montaña y, en concreto, el bosque atlántico. En este Parque Nacional podemos encontrar extensos bosques caducifolios, roquedos y praderías, hayedos, encinares, montañas alpinas y subalpinas, lagos de origen glaciar, turberas y ríos de altas montañas.
CONDICIONES CLIMÁTICAS
Los ecosistemas de bosque atlántico se caracterizan por sus abundantes precipitaciones, distribuidas durante todo el año. Esta humedad asegura la existencia de una importante masa vegetal. En general el clima en los Picos de Europa es suave, pues las temperaturas están moderadas por la proximidad al mar. Sin embargo, el clima es más extremado cuanto mayor es la altitud, alcanzando el mayor rigor en invierno, con fuertes nevadas que se mantienen generalmente hasta Mayo. Ocasionalmente puede llegar a nevar en verano.
Septiembre suele ser el mes más despejado y luminoso.
Existe también un fenómeno relacionado con las nieblas, "los mares de nubes", que se forman por el descenso de la temperatura por las noches, permitiendo al observador contemplar un cielo azul y despejado, teniendo a sus pies las cimas más bajas emergiendo entre las nubes: un autentico espectáculo.
FAUNA
La enorme extensión de Picos de Europa facilita la existencia de una variada y compleja gama de representación animal, que va desde el oso hasta los pequeños roedores, pasando por una gran representación de aves rapaces. Se calcula que esta zona existen, al menos,133 especies de aves, 44 de mamíferos y 32 de anfibios y reptiles.
Las especies más representativas de los Picos de Europa son:
- El rebeco cantábrico: Es la especie más característica de los Picos de Europa. Habita en el límite superior de los bosques subalpinos y muy cerca de los glaciares y las nieves perpetuas. Atraviesa tramos de nieve o hielo con mayor seguridad que las cabras montesas y recorre con igual facilidad paredes casi verticales, sólo a ellos accesibles.
- El urogallo cantábrico: Es un Lagópodo de gran tamaño, que llega a alcanzar 86 centímetros el macho y 61 centímetros la hembra. Construye el nido entre la maleza, se alimenta de insectos, bayas, hierbas y cuando escasea la comida, con acículas de coníferas.
- El oso pardo: Mamífero omnívoro y plantígrado de casi 1 metro de largo. Tiene la cabeza grande con ojos pequeños y extremidades fuertes con uñas y un cuerpo poderoso cubierto de pelo fuerte y abundante. Es un animal merodeador, se alimenta de todo tipo de vegetales y peces durante el verano, pues en invierno están aletargados
- El águila real: Habita principalmente en zonas montañosas. Es el águila más grande de todas las españolas. Mide de 76 a 89 centímetros y caza pequeños mamíferos como perdices y liebres que lleva al nido, generalmente situado en la parte más baja del territorio de caza, para que el transporte sea lo menos penoso posible.
- Lobo: Mamífero carnívoro, con aspecto de perro, de pelo grisáceo oscuro, que puede medir un metro desde el hocico hasta la punta de la cola. Es un animal salvaje, que vive en manadas, muy jerarquizadas. Cazan en grupo poniendo en práctica verdaderas tácticas de ataque. En primavera tienen sus crías, los lobeznos, en número de 4 a 6. La hembra los cuida y caza lejos de la madriguera para alejar el peligro.
- Gineta: Pertenece a la familia de los vivérridos y, a pesar de su desproporción (tiene el cuerpo alargado y las patitas muy cortas) es muy ágil. Su piel es de color grisáceo y está manchada con lunares y rayas negros. Son de costumbres nocturnas, caza grandes y pequeños roedores, aves, come huevos, insectos anfibios, reptiles y no desprecia ciertos frutos. Su ferocidad hace que prácticamente no tenga predadores.
Otras especies abundantes son los corzos, ciervos, zorros, tejones, comadrejas, jabalíes, búhos reales, buitres, cernícalos, azores, etc.
En los ríos y riachuelos abundan aún las truchas, ya que la pesca está prohibida. En los ríos que van al Cantábrico nacen los salmones, que son cada vez más escasos.
FLORA
Las grandes diferencias de altitud ocasionan en los Picos de Europa variedades climáticas y en consecuencia, de vegetación. En total se puede hablar de unas 70 especies arbóreas y unas 700 de matorrales y herbáceas. Se da la circunstancia de que muchos de los bosques que en su día poblaron las laderas más bajas de estos montes fueron sustituidos por prados artificiales de hierba para el ganado. Hoy, con el declive del pastoreo y con la crisis de la ganadería, algunas de las zonas tradicionales de pastos están siendo invadidas por matorrales, sobre todo de tojo y brezo. En las partes más bajas de las laderas se encuentran los bosques más frondosos, destacando entre las especies más numerosas y comunes el roble, avellano, castaño, arce, tilo, fresno, cerezo o nogal. En la zona más oriental y por lo tanto más cercana al clima mediterráneo, aparecen otras especies menos abundantes, pero sí representativas como la encina, alcornoque, madroño o laurel. Por encima de los 500 metros de altitud, las especies más numerosas son el roble y el haya, cuya presencia puede llegar hasta los 1500 metros de altitud, junto a otras especies como más resistentes como el tejo o el abedul. En las cimas de las montañas la vegetación escasea y se limita a matorrales, líquenes y algunas herbáceas que logran soportar los extremos del clima.
MÁS INFORMACIÓN
Aquí dejo el enlace a un interesante documental sobre el Parque Nacional de los Picos de Europa.